Toda esa arena oscurece el agua.
Las nubes que trae el siroco del desierto
también ocultan los fondos abisales
y desorientan a los grandes peces
en sus singladuras transoceánicas.
A veces vislumbro oasis en los horizontes
que sigo soñando en todas las playas.
También las nubes, cuando traen arena,
viajan siempre entre las aguas
como esos grandes barcos que amarillean
tras el azote incesante del salitre y el viento.
viernes, 30 de diciembre de 2016
viernes, 23 de diciembre de 2016
jueves, 15 de diciembre de 2016
martes, 13 de diciembre de 2016
sábado, 10 de diciembre de 2016
El camino de playa
Recuérdame el camino de aquella playa,
el barranco con piedras arrastradas por las lluvias,
todo aquel azul que nos esperaba más allá de las aulagas.
Ayúdame a escuchar el estruendo de las olas,
y déjame dibujar en los pliegues salados de tu cuerpo
la silueta de aquel abrazo que eternizamos en la arena
antes de que llegara el olvido inevitable de las aguas.
el barranco con piedras arrastradas por las lluvias,
todo aquel azul que nos esperaba más allá de las aulagas.
Ayúdame a escuchar el estruendo de las olas,
y déjame dibujar en los pliegues salados de tu cuerpo
la silueta de aquel abrazo que eternizamos en la arena
antes de que llegara el olvido inevitable de las aguas.
miércoles, 7 de diciembre de 2016
Coincidencias
Coincido con el mar.
A veces ni siquiera me asomo para verlo.
Siento sus corrientes en mi sangre
y aquieta mi ánimo la calma de sus aguas.
Incluso en las ciudades sin océanos
reconozco la bajamar y la pleamar,
y casi toco con la punta de los dedos
esa arena que luego llevo conmigo a todas partes.
También el horizonte se confunde con mi propia mirada.
Y sigo la estela de barcos que viajan hacia ninguna parte.
A veces ni siquiera me asomo para verlo.
Siento sus corrientes en mi sangre
y aquieta mi ánimo la calma de sus aguas.
Incluso en las ciudades sin océanos
reconozco la bajamar y la pleamar,
y casi toco con la punta de los dedos
esa arena que luego llevo conmigo a todas partes.
También el horizonte se confunde con mi propia mirada.
Y sigo la estela de barcos que viajan hacia ninguna parte.
sábado, 26 de noviembre de 2016
Los ojos cerrados
A veces cierro los ojos
y recuerdo las otras vidas.
Allí también cantaban los pájaros.
y el viento movía las hojas de los árboles.
Yo fui pájaro y fui hoja,
y alguna vez fui viento en otros brazos.
y recuerdo las otras vidas.
Allí también cantaban los pájaros.
y el viento movía las hojas de los árboles.
Yo fui pájaro y fui hoja,
y alguna vez fui viento en otros brazos.
lunes, 14 de noviembre de 2016
martes, 1 de noviembre de 2016
Viajeros
Ese viajero no conoce su destino.
Ni siquiera sabe que viajará mañana.
Sí lo sabe ese tren que aguarda en la vía.
El tren llevará al viajero a una ciudad con río.
Cuando llegue recorrerá un puente antiguo
y reconocerá a esa mujer morena
que hoy está sentada en la ribera
mirando hacia las aguas oscuras
de ese río que aún no conoce su memoria.
Ni siquiera sabe que viajará mañana.
Sí lo sabe ese tren que aguarda en la vía.
El tren llevará al viajero a una ciudad con río.
Cuando llegue recorrerá un puente antiguo
y reconocerá a esa mujer morena
que hoy está sentada en la ribera
mirando hacia las aguas oscuras
de ese río que aún no conoce su memoria.
viernes, 21 de octubre de 2016
Una sombra entre la niebla
Esa mujer parece que camina con pasos asustados.
Si te das la vuelta no la verás.
Pasa siempre a mi lado
y luego desaparece como una sombra entre la niebla.
Yo creo que la amé hace muchos años.
La recuerdo como si hubiéramos caminado de la mano,
los dos juntos, en una ciudad con iglesias góticas
y con calles mojadas por la lluvia de sus lágrimas.
Si te das la vuelta no la verás.
Pasa siempre a mi lado
y luego desaparece como una sombra entre la niebla.
Yo creo que la amé hace muchos años.
La recuerdo como si hubiéramos caminado de la mano,
los dos juntos, en una ciudad con iglesias góticas
y con calles mojadas por la lluvia de sus lágrimas.
miércoles, 19 de octubre de 2016
viernes, 30 de septiembre de 2016
Bruto y César
Toda la vida, César,
una y otra vez
te tropezarás a Bruto
en cualquier sendero,
como te lo tropezaste en las cuevas
antes de que te apuñalara en Roma,
siempre estará cerca de tu sombra
para intentar matarte
de mil maneras diferentes.
una y otra vez
te tropezarás a Bruto
en cualquier sendero,
como te lo tropezaste en las cuevas
antes de que te apuñalara en Roma,
siempre estará cerca de tu sombra
para intentar matarte
de mil maneras diferentes.
miércoles, 28 de septiembre de 2016
martes, 27 de septiembre de 2016
Amores de cine
No me importa si me engañaron
o si fueron grandes actrices para quererme.
Yo me quedo con sus besos
porque yo me creo siempre los besos y las caricias,
como me creía todas las historias de amor de las películas
cuando los demás espectadores habían abandonado la sala.
o si fueron grandes actrices para quererme.
Yo me quedo con sus besos
porque yo me creo siempre los besos y las caricias,
como me creía todas las historias de amor de las películas
cuando los demás espectadores habían abandonado la sala.
viernes, 26 de agosto de 2016
La playa
Arena negra, marea vacía.
El océano arrastrando sombras.
Mi cuerpo entre la espuma de las olas.
Siempre regreso a aquel azul
al final del camino del barranco.
El océano arrastrando sombras.
Mi cuerpo entre la espuma de las olas.
Siempre regreso a aquel azul
al final del camino del barranco.
sábado, 6 de agosto de 2016
Los abrazos imposibles
Hay abrazos que se demoran una vida entera
y otros que se evitan para no quebrar la magia.
Tú y yo podíamos haber recuperado el tiempo,
pero ya no somos aquellos adolescentes
sin heridas y sin mil desengaños en el alma.
Ahora somos un hombre y una mujer,
padres divorciados, con más arrugas,
con hijos, con muchos viajes,
con casas que fuimos olvidando,
y con ese temor al fracaso que dejan los años.
y otros que se evitan para no quebrar la magia.
Tú y yo podíamos haber recuperado el tiempo,
pero ya no somos aquellos adolescentes
sin heridas y sin mil desengaños en el alma.
Ahora somos un hombre y una mujer,
padres divorciados, con más arrugas,
con hijos, con muchos viajes,
con casas que fuimos olvidando,
y con ese temor al fracaso que dejan los años.
jueves, 4 de agosto de 2016
Vaqueros
Hay una cierta tristeza repentina, casi melancólica,
en esa primera rotura de un pantalón vaquero
que ha viajado con nosotros a todas partes.
Ya sabes que luego solo habrá remiendos
y que nadie logrará detener lo inevitable.
Te lo seguirás poniendo unos días más
como cuando le eres fiel a un amor
que sabes que está naufragando.
Pero no hay remedios para los finales.
Ni tampoco costuras milagrosas.
Se seguirán desgarrando poco a poco
con esa decadencia que va dejando el tiempo
en cada una de las prendas que nos acompañan.
en esa primera rotura de un pantalón vaquero
que ha viajado con nosotros a todas partes.
Ya sabes que luego solo habrá remiendos
y que nadie logrará detener lo inevitable.
Te lo seguirás poniendo unos días más
como cuando le eres fiel a un amor
que sabes que está naufragando.
Pero no hay remedios para los finales.
Ni tampoco costuras milagrosas.
Se seguirán desgarrando poco a poco
con esa decadencia que va dejando el tiempo
en cada una de las prendas que nos acompañan.
domingo, 31 de julio de 2016
El zumbido
El zumbido de una abeja
también equilibra el universo,
y el aleteo de esa mariposa,
y las piedras que mueven las mareas.
No solo son Mozart o Beethoven.
Ni tú cuando te sientes el rey del mundo.
Ese simple zumbido que no percibes
entre el ruido del tráfico y el viento
también consigue que Urano y Neptuno
no acaben chocando frontalmente.
también equilibra el universo,
y el aleteo de esa mariposa,
y las piedras que mueven las mareas.
No solo son Mozart o Beethoven.
Ni tú cuando te sientes el rey del mundo.
Ese simple zumbido que no percibes
entre el ruido del tráfico y el viento
también consigue que Urano y Neptuno
no acaben chocando frontalmente.
martes, 19 de julio de 2016
Océanos y riberas
Jamás salgo de un cuerpo para ir a otro
ni tampoco me baño dos veces en la misma playa.
Heráclito de Éfeso lo explicó con los ríos.
Yo prefiero besarte y cerrar los ojos
cuando desciendo a tu vientre
como un náufrago perdido.
Y prefiero el océano de tu cuerpo
a todas las riberas presocráticas.
ni tampoco me baño dos veces en la misma playa.
Heráclito de Éfeso lo explicó con los ríos.
Yo prefiero besarte y cerrar los ojos
cuando desciendo a tu vientre
como un náufrago perdido.
Y prefiero el océano de tu cuerpo
a todas las riberas presocráticas.
domingo, 10 de julio de 2016
viernes, 8 de julio de 2016
Polillas
Hoy era el día en que salían las alas.
Vuelan unos segundos
y se queman contra la luz del flexo.
Luego se arrastran de nuevo
y se convierten en gusanos indefensos.
Casi todas mueren aplastadas.
Solo se salvan las que logran volar de nuevo.
Vuelan unos segundos
y se queman contra la luz del flexo.
Luego se arrastran de nuevo
y se convierten en gusanos indefensos.
Casi todas mueren aplastadas.
Solo se salvan las que logran volar de nuevo.
miércoles, 6 de julio de 2016
Las nubes
Están las nubes en el horizonte,
de niño me enseñaron
que estaban cogiendo agua en el océano,
todo está azul sobre nuestras cabezas,
pero allí ya oscurece
y se va gestando la borrasca
que acabará mojando las calles
y borrando cada uno de nuestros pasos.
de niño me enseñaron
que estaban cogiendo agua en el océano,
todo está azul sobre nuestras cabezas,
pero allí ya oscurece
y se va gestando la borrasca
que acabará mojando las calles
y borrando cada uno de nuestros pasos.
jueves, 23 de junio de 2016
Ojos abiertos
Los pájaros que vuelan libres en los campos
mueren siempre con los ojos abiertos,
los encuentro entre los árboles,
quietos y serenos, tendidos boca arriba,
reflejando un cielo azul de espejos
en sus pupilas resecas e inertes.
mueren siempre con los ojos abiertos,
los encuentro entre los árboles,
quietos y serenos, tendidos boca arriba,
reflejando un cielo azul de espejos
en sus pupilas resecas e inertes.
sábado, 11 de junio de 2016
Las escenas
Saborear despacio
el tiempo que uno tiene
para amar y respirar,
más allá de las palabras
y de los argumentos
que seguimos inventando
para justificar las horas
en que no sabemos si ser
héroes o supervivientes,
aves de paso en una escena
que dura poco si no es intensa.
el tiempo que uno tiene
para amar y respirar,
más allá de las palabras
y de los argumentos
que seguimos inventando
para justificar las horas
en que no sabemos si ser
héroes o supervivientes,
aves de paso en una escena
que dura poco si no es intensa.
viernes, 6 de mayo de 2016
Presencias
Hay personas que se quedan
en la sombra de nosotros mismos,
entrelazadas en nuestros dedos,
las sientes a tu lado cuando caminas
y te hablan algunas noches en los sueños.
A veces cierro los ojos
y reconozco el perfume de su presencia.
en la sombra de nosotros mismos,
entrelazadas en nuestros dedos,
las sientes a tu lado cuando caminas
y te hablan algunas noches en los sueños.
A veces cierro los ojos
y reconozco el perfume de su presencia.
lunes, 2 de mayo de 2016
jueves, 28 de abril de 2016
El primer canto
Vino solo para cantarte.
Llegó desde muy lejos.
Sobrevoló en silencio
barrancos y montañas.
No había cantado antes.
Hoy lo intentó en tu azotea
y tú lo escuchas de fondo
sin saber que estás asistiendo
al mayor acontecimiento
de este nuevo día
que ya se vislumbra en la playa.
Llegó desde muy lejos.
Sobrevoló en silencio
barrancos y montañas.
No había cantado antes.
Hoy lo intentó en tu azotea
y tú lo escuchas de fondo
sin saber que estás asistiendo
al mayor acontecimiento
de este nuevo día
que ya se vislumbra en la playa.
viernes, 15 de abril de 2016
El gesto sereno
La belleza de ese pájaro
con el gesto sereno,
tendido boca arriba
junto a una acacia,
bajo un cielo azul
que aún reconoce sus vuelos
y conserva intacta la estela
de su plateado plumaje.
con el gesto sereno,
tendido boca arriba
junto a una acacia,
bajo un cielo azul
que aún reconoce sus vuelos
y conserva intacta la estela
de su plateado plumaje.
domingo, 10 de abril de 2016
El humo
El humo escribe
en el horizonte
unas letras blancas
de chimenea y olvido,
más allá de las montañas,
donde vive aquel hombre
que quemó todos los recuerdos
para no morir de frío.
en el horizonte
unas letras blancas
de chimenea y olvido,
más allá de las montañas,
donde vive aquel hombre
que quemó todos los recuerdos
para no morir de frío.
domingo, 3 de abril de 2016
La hoja seca
Los pájaros miran la caída de las hojas secas,
ese baile final de la belleza
cuarteada por el sol y por la lluvia,
la caída serena sobre las baldosas,
el eco del roce con el suelo,
un crujido de adiós entre las ramas,
todo lo que observa el pájaro en silencio
para después descender como la hoja
y aprender a posarse sobre el suelo de la plaza.
ese baile final de la belleza
cuarteada por el sol y por la lluvia,
la caída serena sobre las baldosas,
el eco del roce con el suelo,
un crujido de adiós entre las ramas,
todo lo que observa el pájaro en silencio
para después descender como la hoja
y aprender a posarse sobre el suelo de la plaza.
jueves, 31 de marzo de 2016
La paloma muerta
El domingo vimos una paloma muerta,
una de las palomas que ayer volaban junta a ella.
Mi hija creía que estaba dormida
hasta que llegó un hombre huraño,
la envolvió en un papel de periódico
y la tiró al contenedor de la basura.
Mi hija me miraba fijamente
y me decía que estaba triste.
Yo ya no podía engañarla
cambiándole la muerte por el sueño.
una de las palomas que ayer volaban junta a ella.
Mi hija creía que estaba dormida
hasta que llegó un hombre huraño,
la envolvió en un papel de periódico
y la tiró al contenedor de la basura.
Mi hija me miraba fijamente
y me decía que estaba triste.
Yo ya no podía engañarla
cambiándole la muerte por el sueño.
domingo, 27 de marzo de 2016
El azul lejano
Hacía volar a las palomas
con una rama del árbol en su mano,
corriendo de un lado para otro
sobre las baldosas de la plaza centenaria
un sábado por la tarde del mes de marzo.
Yo escuchaba la música del agua de la fuente
y miraba hacia un cielo azul lejano
más allá del verde de los árboles,
uno de esos cielos azules
que jamás amarillean con los años.
con una rama del árbol en su mano,
corriendo de un lado para otro
sobre las baldosas de la plaza centenaria
un sábado por la tarde del mes de marzo.
Yo escuchaba la música del agua de la fuente
y miraba hacia un cielo azul lejano
más allá del verde de los árboles,
uno de esos cielos azules
que jamás amarillean con los años.
martes, 22 de marzo de 2016
Mosaicos
Aún se podía reconocer el mosaico,
aquel juego de piedras de colores
que había resistido el tránsito de los años.
Me agaché y retiré el polvo de las grietas.
Luego acaricié unos pasos lejanos,
la huella de quien caminó alguna vez
por aquellas baldosas desgastadas.
aquel juego de piedras de colores
que había resistido el tránsito de los años.
Me agaché y retiré el polvo de las grietas.
Luego acaricié unos pasos lejanos,
la huella de quien caminó alguna vez
por aquellas baldosas desgastadas.
sábado, 20 de febrero de 2016
Intemperie
Estaba en la calle
sin corazón y sin llaves
de madrugada
en una de esas noches frías
de invierno
caminando muy despacio
para que su soledad
no resbalara en la escarcha.
sin corazón y sin llaves
de madrugada
en una de esas noches frías
de invierno
caminando muy despacio
para que su soledad
no resbalara en la escarcha.
sábado, 6 de febrero de 2016
Notas
Deja escrita la sombra de tu recuerdo
en una pequeña hoja arrugada por el tiempo,
recuérdales que tuviste suerte
y que te queda toda la eternidad por delante.
La vida no era ni tan rancia ni tan miserable.
Te salvaron muchas veces las caricias
y las emociones de los instantes inolvidables.
Escríbelo por si alguna vez regresas
y te sientes extraviado entre estas mismas calles.
en una pequeña hoja arrugada por el tiempo,
recuérdales que tuviste suerte
y que te queda toda la eternidad por delante.
La vida no era ni tan rancia ni tan miserable.
Te salvaron muchas veces las caricias
y las emociones de los instantes inolvidables.
Escríbelo por si alguna vez regresas
y te sientes extraviado entre estas mismas calles.
sábado, 23 de enero de 2016
La pesca
En el temblor
estaba la muerte,
tú la sentías entre tus dedos,
el pez aleteando en el agua
y fuera el verano,
el cielo azul y la playa.
estaba la muerte,
tú la sentías entre tus dedos,
el pez aleteando en el agua
y fuera el verano,
el cielo azul y la playa.
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